Como en espejo...

En psicología dicen que todo lo que te molesta en los otros es una proyección de algo tuyo.

Por eso no hay mejor escuela que mirar los defectos que encontramos en el prójimo y ver en nuestro interior, en nuestra sombra, que tenemos de ese defecto en nosotros mismos.

Hace mucho tiempo que este mundo no me gusta, el dolor que el ser humano al que desgraciadamente pertenezco, infringe a los otros me duele, no entiendo la maldad y las ganas de hacer sufrir a los demás y sobre todo a los mas débiles.

He aprendido a tener empatia con el dolor ajeno, y sinceramente me he convertido en una persona que disfruta del estar sola y cada vez me siento mejor conmigo misma.

He logrado alejar los malos pensamientos y si bien no soy una santa hace mucho tiempo que aprendí a perdonar y a través del dolor he aprendido mucho en el camino de mi vida...he sufrido mucho.

Si hago psicoanálisis o terapia en el face...no, para nada, no creo necesitar psicoanalizarme, lo hice por mas de veinte años con tres maravillosas personas, dos de las cuales me leen y comparten mi face.. Juan Carlos Selva Andrade y Virginia Martinez y mi maestro Oscar Hernández, que seguro no debe estar vivo y su co-terapeuta mi entrañable amiga Victoria.

Lo que escribo lo hago porque recibo palabras de todos ustedes y a muchos les hace bien, o se sienten identificados por lo que escribo.

He aprendido a amar, a perdonar, a no desearle el mal a nadie y a vivir en serio bajo las enseñanzas de Jesús de Nazareth.

Soy una agradecida de la vida, hoy he podido en un país lejano que es como el propio, a nuevamente sonreír.

Tengo dos hijos a quienes amo Maximiliano Ceballos y Romy Ceballos y dos nietos maravillosos, Thiago y Nahomi y próximamente seré nuevamente abuela.

Agradezco a la vida lo que he aprendido y seguro que cuando me vaya de esta encarnación, me voy mejor de lo que llegue.

Me considero una bendecida...abracen a la gente que los ama y díganle que los aman. El tiempo es cruel y no perdona...como decía mi adorado Juan Gabriel, Dios perdona pero el tiempo no.

Vivan el presente y sean felices....vivan el día de hoy como si fuera el ultimo de su vida.A uno solo que le sirvan mis palabras me doy por satisfecha.

Namaste y gracias por todo. 

Cris Carbone